En guerra con prepagas y obras sociales, las farmacias amenazan con nuevos paros

farmaceuticosEl 17 de junio marcharán en todo el país. Dicen que varios comercios cerraron por la inviabilidad económica del negocio. Y se quieren reunir con el Gobierno.

Las farmacias tenían previsto resolver ayer el anuncio de una nueva suspensión de los descuentos en la compra de medicamentos a afiliados de prepagas y obras sociales, aunque finalmente no lo hicieron. La postura que se impuso, en cambio, es más dura.
El 5 de julio próximo los comercios directamente cortarán la atención al público en general, una medida que se extenderá durante dos horas y que circulará en forma aleatoria entre las cerca de 15.000 farmacias que funcionan a lo largo de toda la Argentina.
Así quedó definido luego de una reunión de más de dos horas que mantuvieron la Confederación Farmacéutica Argentina (COFA), la Federación Argentina de Cámaras de Farmacias (Facaf), y la Asociación de Farmacias Mutuales y Sindicales (Afmsra).
“Tal como esta hoy, el sistema ya no se sustenta. El aporte que hace nuestro sector en comparación con el que hacen las prepagas y las obras sociales no sólo no tiene razón de ser, sino que además está mandando a la quiebra a muchos comerciantes. Esto tiene que empezar a cambiar de una vez”, se quejó ante El Cronista Claudio Ucchino, presidente del Colegio de Farmacéuticos de Capital Federal.
Como medida previa a esa “jornada de persianas bajas”, los farmacéuticos realizarán el 26 de junio próximo una movilización que tendrá epicentro en La Plata pero que también se replicará en diferentes localidades argentinas.
Además, para los próximos días se procurará un encuentro con la Superintendencia de Servicios de Salud (SSS), que se podría concretar el 17 de este mes. Allí, los farmacéuticos le plantearán a esa dependencia oficial su problemática, para que interceda en el conflicto.
En forma paralela a esta medida, las farmacias continuarán con su firme intención de contactar a las empresas de medicina prepaga y a las obras sociales.
“Este conflicto no es nuevo, sino que lleva ya años. Pero ahora el cierre de farmacias se comenzó a hacer cada vez más duro y la situación no se puede aguantar más. En todo este tiempo, jamás recibimos una propuesta por parte de prepagas y obras sociales; ambas dejaron que el tema pasara de largo. Seguimos esperando un acercamiento”, sostuvo Ucchino.
El foco central del problema es el porcentaje que cada una de las partes involucradas en el negocio farmacéutico aporta a la hora de hacer frente a los descuentos de los afiliados de prepagas y obras sociales.
Según denuncian los farmacéuticos, los comercios son los que más frente le hacen a esta situación ya que, de un descuento promedio del 40% con el que se beneficia quien compra un medicamento, aportan un 20%, contra un 10% de los laboratorios y un porcentaje similar de las prepagas y obras sociales.
Las farmacias también apuntan que ante la falta de dinero para comprar medicamentos, en algunos comercios, sobre todo en aquellos más chicos, se comenzó a complicar desde hace algunos meses la reposición de stock, más los remedios de mayor complejidad, es decir los más caros.

El Cronista 12-06-13