El secretario adjunto del Centro de Empleados de Farmacia Paraná, Adrián Narduzzi, informó a APFDigital que adhieren a una solicitada emitida por la Federación preocupada por anuncios de las corporaciones responsables de las oficinas de Farmacias • Dichos anuncios “ponen en peligro nuestras fuentes laborales que alcanzan en nuestro país a 50 mil trabajadores”, resaltó.
Narduzzi informó que el Centro de Empleados de Farmacia Paraná adhiere a una solicitada emitida por la Federación Argentina de Trabajadores de Farmacia, cuyo secretario general es Roque Facundo Garzón.
Tanto el Centro como la Federación mostraron su preocupación por anuncios de las corporaciones responsables de las oficinas de Farmacias que “ponen en peligro nuestras fuentes laborales, que alcanzan en nuestro país a 50 mil trabajadores”, dijo el dirigente local.
La Solicitada, a la que tuvo acceso esta Agencia, es la siguiente: “Los Trabajadores de Farmacias de todo el país, estamos preocupados por el anuncio de los corporaciones responsables de las oficinas de Farmacias de una grave situación financiera que amenaza con la continuidad del sistema de dispensación de medicamentos a la seguridad social (obras sociales sindicales, prepagas, obras sociales provinciales, etc.) debido a una forma de contratación que escapa a la potestad de los propietarios, quedando a merced de los convenios que se realizan entre la Industria Farmacéutica, gobierno y las obras sociales más significativas en la comercialización”.
“Sumado a esto –continúa-, las oficinas de farmacias que son un servicio público impropio y el primer centro de salud al que accede la población, no son formadoras de precios, siendo esto, potestad de los laboratorios productores de medicamentos”.
Y añaden: “En estas condiciones y limitaciones la continuidad del funcionamiento de las farmacias se pone en peligro, como así también las fuentes de trabajo que cubre a más de 50 mil familias en todo el país”.
“En nuestra humilde opinión en un sistema de libre comercio, este debería acordarse entre el medio de dispensación de medicamentos (farmacia) y los consumidores (pacientes y obras sociales, etc.) sin demasiada intermediación, ya que toda alteración a esta situación pone en peligro la situación económico-financiera de la oficina de farmacia, como también la dispensa de los medicamentos a la población en general, con alto riesgo de pérdida de las fuentes de trabajo”, concluyen.