El ministro de Salud de la Nación, Daniel Gollan, sostuvo hoy ante la 68º Asamblea Mundial de la Organización Mundial de la Salud (OMS) reunida en Ginebra (Suiza) que “la salud es un derecho humano esencial y por lo tanto no puede ni debe estar regulada por las reglas del mercado”, en referencia “al devastador impacto” que tiene la financiación de medicamentos de alto costo.
El ministro de Salud, Daniel Gollan, expresó hoy que “la magnitud del gasto en medicamentos de alto costo representa el principal condicionamiento a la hora de contar con los recursos necesarios para sostener nuestros sistemas sanitarios”, tras su discurso ante sus pares de todo el mundo en la 68ª Asamblea Mundial de la Organización Mundial de la Salud (OMS), en Ginebra.
El funcionario explicó, en diálogo con Télam, que los fondos derivados a este tipo de tratamientos de baja incidencia “van en detrimento de políticas masivas, como la inversión en sistemas de cobertura universal, la prevención de enfermedades crónicas no transmisibles o las estrategias de vacunación masiva”.
Los elevados precios de los medicamentos complejos “nos están desfinanciando a los sistemas y nos impiden utilizar fondos cuantiosos que deberían direccionarse hacia la atención primaria de la salud”, aseguró Gollan, y añadió que si se hace el cálculo del promedio del precio de todos los medicamentos más utilizados en el mundo, “el costo es tan sólo de 18 dólares, pero en el promedio de los medicamentos biotecnológicos, ese costo se eleva a 800 dólares”.
El titular de la cartera sanitaria reafirmó que “resulta imprescindible realizar un estudio fehaciente de los costos de investigación y desarrollo que aducen los laboratorios para fijar semejantes precios. Es incompatible plantear un sistema de salud financiable, lógico y racional, cuando se nos exige pagar enormes costos por tratamientos tan caros”.
Para hacer frente a este problema, consideró que los países tienen que “fortalecer y utilizar más mecanismos como el Fondo Rotatorio de Vacunas y el Fondo Estratégico de Medicamentos que nos provee en nuestra región la Organización Panamericana de la Salud (OPS)”.
“El impacto de estas herramientas ha sido enorme para nuestros sistemas ya que hemos logrado reducir enormemente el costo de tratamientos muy costosos como el del VIH, y son miles las personas que hoy viven gracias a los medicamentos genéricos”, precisó el ministro.
“A mi entender, los organismos internacionales como la OMS o la OPS deberían coparticipar en la conformación de fondos para la investigación y desarrollo de medicamentos producidos por los sistemas públicos”, consideró Gollan.
Más temprano, el ministro afirmó ante la Asamblea que “la salud es un derecho humano esencial y por lo tanto no puede ni debe estar regulada por las reglas del mercado”, en referencia “al devastador impacto” que tiene la financiación de medicamentos de alto costo.
“Es necesario hallar mecanismos regulatorios y de financiación de la investigación, el desarrollo y producción de nuevos fármacos que posibiliten precios razonables para poder cumplir el objetivo del acceso universal”, puntualizó el funcionario ante los representantes de los 194 países que asisten a la asamblea, órgano decisorio supremo de la OMS.
La denuncia, que apunta particularmente a los medicamentos biotecnológicos, refiere al “devastador impacto” para los sistemas nacionales de salud del financiamiento de los medicamentos de alto costo y baja frecuencia; destacó el valor social de la vacunación y expresó su preocupación por la epidemia de sobrepeso y obesidad.
El titular de la cartera sanitaria nacional precisó que “herramientas eficaces” como los fondos rotatorios y estratégicos “están ayudando a resolver problemas de accesibilidad a medicamentos”, pero advirtió que se trata de una problemática “de alcance regional y mundial” y remarcó que “si estos procesos continúan desarrollándose bajo la lógica del mercado y de una altísima tasa de rentabilidad, será imposible conseguir” el objetivo del acceso universal a la salud.
Durante su intervención en la Asamblea, Gollan destacó el papel de la OMS en el “liderazgo del plan mundial de vacunación” y aseguró que Argentina cree “en el valor sanitario y social que representa contar con un calendario oficial de vacunación completo y accesible para toda la población sin barreras de ningún tipo”.
En ese aspecto, destacó que “este año incorporó la vacuna número 19, gratuita y obligatoria para toda la población” y que “13 de las 19 vacunas se agregaron en la última década”.
Además, mencionó el rol central de las Enfermedades Crónicas No Transmisibles y su impacto en la salud.
“Nos encontramos preocupados por la epidemia de sobrepeso y obesidad que crece en nuestras poblaciones y en particular afecta a nuestros niños y adolescentes, condicionando la salud de las generaciones actuales y futuras”, sostuvo el ministro al explicar que Argentina “avanzó fuertemente en la adopción de medidas tendientes a reducir la obesidad y otros factores de riesgo desde la promoción y prevención”.
Tras considerar “imprescindible una acción activa y permanente de los Estados como reguladores y promotores de entornos saludables para el mejor vivir”, el ministro advirtió que “no se debe dejar esta seria problemática sanitaria librada únicamente al arbitrio de las conductas individuales y estilos de vida de la población”.
Fuente: OMS