Crece la preocupación por los robos, cada vez más frecuentes. Y los locales ya parecen fortalezas. Alarmas, vidrios especiales, rejas y personal de vigilancia generan gastos fijos que, por otra parte, afectan la rentabilidad. Las farmacias invierten más de 10 mil pesos en segurida.
Las farmacias invierten hasta 13 mil pesos para instalar mecanismos de seguridad y resguardar a los locales de los asaltos para proteger así a clientes, empleados y profesionales.
Según un relevamiento realizado por la Federación Argentina de Cámaras de Farmacias (FACAF), 10 mil pesos se emplean en sistemas de seguridad y además todos los meses también pagan entre 2500 y 3000 pesos por servicios relacionados con la seguridad. Es uno de los costos fijos que deben afrontar y que le resta rentabilidad al emprendimiento.
Además, los farmacéuticos y responsables de estos comercios deben destinar entre 2.500 y 4.000 pesos por mes para mantener los diferentes servicios que prestan empresas o compañías dedicadas al rubro como monitoreos, custodias y seguros, entre otros.
“La seguridad es una preocupación central en nuestra actividad. Los episodios delictivos en establecimientos farmacéuticos son cada vez más frecuentes y nosotros debemos preservar la integridad no sólo de nuestros clientes, sino también del personal que se desempeña en los locales”, dijo el presidente de FACAF, Miguel Lombardo.
“Los costos que se derivan a la contratación de herramientas que buscan mejorar la seguridad achican los márgenes de rentabilidad de nuestros asociados, porque en la mayoría de los casos ya resultan imprescindibles para protegerse de los hechos de robos y asaltos”, explicó Lombardo.
Los números de la inversión son muy variables, de acuerdo con la región del país en la que se contrate y los niveles de cobertura que se incorporan.
Para citar algunos casos: un metro cuadrado de reja de hierro, para la protección de puertas y ventanas cuesta aproximadamente 750 pesos. “Cualquier comercio requiere al menos cinco metros, o sea 3750 pesos”, aseguraron en FACAF. Para la protección con vidrio blindex, que ya utilizan prácticamente en todos los locales, los dueños de farmacias deben desembolsar al menos 1.300 pesos por cinco metros cuadrados, incluida la colocación.
Un equipo de monitoreo de alarma cuesta unos 3.500 y las empresas cobran hasta 2.300 para la colocación del sistema en el comercio. A esto se le debe sumar -en algunos casos- hasta 5.000 pesos para la puesta en funcionamiento de sistemas de cámaras y monitoreo interno.
“Los farmacéuticos tenemos que atender en locales que parecen fortalezas. Y nos tuvimos que acostumbrar a este nuevo problema, bastante más diferente que en el resto de los negocios. En el imaginario social todavía persiste la idea de la farmacia como un rubro de altísima rentabilidad y con disposición de dinero efectivo. Por eso somos víctimas frecuentes de hechos de inseguridad, cuando en realidad los farmacéuticos manejan a diario recetas, ordenes de pago y otros documentos de uso interno y para reintegro”, aclaró Lombardo.
A estos valores iniciales de instalación deben sumarse los costos fijos derivados de la búsqueda de mayor seguridad. El seguro -que en algunas jurisdicciones es obligatorio- puede tener un arancel de hasta 600 pesos mensuales. El personal de seguridad, en la provincia de Buenos Aires, cuesta 45 pesos por hora. Esto para una farmacia que atiende de lunes a sábado puede representar hasta 2.400 pesos por mes. El abono de las alarmas van desde los 260 a los 400 pesos según la cobertura.
Fuente: Diario Popular 15-09-2014