Viagra: crece el mercado ilegal y el consumo en adolescentes

viagra jóvenesLa Confederación Farmacéutica Argentina indicó que se venden 3,6 millones de cajas, un 20% más que hace siete años. Advierten que las consiguen por Internet, en kioscos y hoteles alojamiento. El uso recreativo en los más jóvenes.

A 15 años de su

desembarco en la Argentina, el Sildenafil, la droga muchas veces tildada como “milagrosa” a la hora de lograr erecciones duraderas, aumentó sus ventas, y se convirtió en la favorita en la previa del acto sexual, aún por quienes no padecen ningún tipo de disfunción sexual. Los especialistas denuncian el crecimiento del mercado ilegal, el abuso y adicción por parte de los pacientes.

 En los últimos siete años las ventas crecieron casi un 20 por ciento. Según los últimos datos del Observatorio Salud, Medicamentos y Sociedad de la Confederación Farmacéutica Argentina (COFA), en 2011 se dispensaron 3,5 millones de envases de la droga (de una y dos pastillas). En tanto, en 2012, fueron 3,6 millones las las unidades vendidas, lo que demuestra un crecimiento del 3 por ciento. Mientras que el mercado total (todo tipo de medicamentos) creció un 4% en unidades.

El principio activo fue patentado y popularizado con el nombre de Viagra en 1996 por el laboratorio Pfizer, y se vende sólo bajo receta médica archivada. Sin embargo, el comercio de la tan requerida pastillita azul, no termina ahí y se extiende también a Internet, kioscos, y hoteles alojamiento. Asimismo, la droga suele conseguirse en las farmacias sin el requerimiento de una prescripción médica. “Se estima que el mercado ilegal tendría un volumen igual o mayor al del mercado legal”, aseguró Ricardo Aizcorbe, presidente de la COFA en diálogo con Tiempo Argentino.
El principio activo es un potente vasodilatador que libera óxido nítrico que lleva a la relajación muscular, eleva el flujo de sangre y alcanza la erección. Debe tomarse una hora antes del encuentro sexual y en farmacias cuesta entre 50 a 200 pesos dependiendo de la marca (en el país son más de 50).
El fenómeno del consumo indiscriminado de la pastilla azul no solo afecta a los hombres adultos, sino que los especialistas psicólogos, sexólogos y médicos alertan sobre el aumento de su consumo también por parte de los adolescentes y jóvenes.
Los chicos lo llaman “ayudín”, haciendo referencia a la “ayuda” que creen que les proporciona en el momento del acto sexual. Incluso muchas veces pueden conseguirla en algunos kioscos de la provincia de Buenos Aires, particularmente en los cercanos a discotecas, donde se lo conoce como el “combo del Amor”, un pack compuesto por tres productos:  preservativos, Sildenafil y bebida energizante.
Aproximadamente  1,8 millones del total de unidades vendidas en el país se expenden en territorio bonaerense por medio de sus 4500 farmacias. “Sabemos que la venta ilegal de este tipo de drogas existe y en 2012 por medio de la Red de vigilancia farmacéutica, hicimos una denuncia por un lote de este medicamento que incautó en la aduana”, destacó Isabel Reinoso, directora del Colegio de la provincia de Buenos Aires, quien explicó que el control del mercado legal lo realizan los ministerios de Salud de cada provincia.
En 2010, una investigación del departamento de farmacología del Ministerio de Salud de la Nación posibilitó cerrar tres páginas web dedicadas a la venta ilegal de Sidelnafil. “Logramos combatir con un gran foco de venta irregular de viagra”, dijo Carlos Manasero, jefe de la dirección de Farmacología de la provincia de Mendoza. La medida se basó en la Resolución Nº  1644/08 de ANMAT que prohíbe la venta de medicamentos por Internet.
“Debería existir un control más estricto por parte del farmacéutico. En muchos casos, los pacientes consiguen la droga en farmacias y sin receta”, destacó Pedro Lipszyc, director del departamento de Farmacología de la Facultad de Medicina de la UBA.
Los especialistas recordaron que la contraindicación que tiene el Sildenafil es su combinación con remedios a base de nitritos, recetados en general para personas con problemas cardíacos, por lo que ante la posibilidad de sufrir algún episodio cardíaco y haber tomado el principio activo, las consecuencias pueden ser gravísimas desde hipotensión severa, desmayos y hasta la muerte.
Esta droga también puede generar un hábito. “Un paciente que ocasionalmente toma este tipo de drogas podría padecer alguna disfunción sexual y necesitar la toma en cada oportunidad para poder conseguir una erección”, dijo a este diario el sexólogo León Gindín.
Por su parte, Carlos Damín, jefe de toxicología del Hospital Fernández opinó que “en la Argentina el Sildenafil se utiliza mal todo el tiempo. Los hombres lo usan sin tener problemas de erección y los adolescentes se inician en la toma por temor a fallar. El consumo de Viagra se transformó en un uso recreativo de la droga”.
El especialista también destacó que la mezcla con alcohol puede provocar una bajada de tensión (mareos, pérdida de equilibrio), con cuadro sincopal, y posibles arritmias cardiacas”. También es muy peligroso mezclarlo con drogas de diseño, como el éxtasis o la ketamina, ya que es muy difícil saber qué contienen y en qué cantidades. “Sólo con que alguna de estas drogas incluyera un vasodilatador para abaratar los costes, el cóctel sería letal. Por ejemplo, ocurre con la sustancia llamada “popper”.
Para los expertos en sexualidad, la toma indiscriminada del sildenafil es un fenómeno psicosocial que “quiere convencer que si no tenés una buena erección perdurable en el tiempo, no servís, y que otorga seguridad para no fallar”, explicó Gindín, “pero no es más que eso, una construcción”. «
 
 
Enemigos de la erección
Tabaco: un atado diario es suficiente para incrementar en un 60% las probabilidades de sufrir disfunción eréctil. Según Boston Medical Group, clínica especializada en salud sexual masculina, el 16,5% de los hombres menores de 35 años que padecen disfunción eréctil se debe al excesivo consumo de tabaco.  
 
Alcohol: entre un 3,2% y un 64,4% de los hombres en estado de embriaguez no tienen una respuesta de erección satisfactoria para mantener relaciones sexuales. El 62,5% de los hombres entre 18 y 35 años que sufren disfunción eréctil se debe al abuso de consumo de bebidas alcohólicas.
 
Drogas: la cocaína es un estimulante del sistema nervioso central que además actúa como vasoconstrictor, reduciendo el flujo sanguíneo en venas y arterias. El 27% de los adictos presenta dificultades para lograr una erección y un 15,6% de los jóvenes con disfunción eréctil consume estupefacientes.
 
 
“Se exige la potencia”
Porque no quieren “fallar”, o porque quieren “rendir” a la hora de mantener relaciones sexuales, muchos de los adolescentes y jóvenes se refugian en el sildenafil para sentirse más “seguros” en su desempeño sexual.
“Vivimos en una sociedad falocéntrica en la que, como mandato social, a los varones se les dice que deben tener un pene grande y erecto, salir con muchas chicas, y tener muchas relaciones sexuales como garantía de éxito. Lo cierto es que muchas veces no se necesita de esta medicación y tampoco es cierto que el placer y el éxito sexual dependa de ello”, explicó Andrea Gómez, psicóloga y sexóloga. “Por ejemplo, los varones deberían saber que las mujeres disfrutan más del sexo por estimulación clitoridiana y caricias que con penetración excluyente”, destacó. 
Por su parte, Any Krieguer, psicóloga de la Asociación Psicoanalítica Argentina (APA), aseguró que los jóvenes buscan un plus, y se debe a la exigencia imperante en esta sociedad”, y destacó que “entre los profesionales estamos debatiendo cómo hacer frente a esta problemática”.
Claudio Baldiviezo, un estudiante de 18 años comentó a Tiempo Argentino que “muchos chicos suelen consumir Viagra por curiosidad y puede que influencien porque todo pasa por el sexo”. Para Rochi Filipini, de 15 años, se trata de “una cuestión social. Creo que debe haber presión hacia los chicos porque antes el beso marcaba el crecimiento en una relación, hoy es el sexo.”
Al ser consultada por este diario, Marta Boimel, sexóloga educativa, aseguró que “los medios de comunicación en su discurso sostienen que para ser exitoso hay que ser potente”. La especialista también hizo hincapié en la “falta de leyes de educación sexual en el país”.
Para Daniel Shmucler, especialista en Adolescentes de la APA, “el crecimiento del consumo en adolescentes se debe a la fantasía del rendimiento sexual fomentada por los medios, y por el alto consumo de alcohol que inhibe la erección”. El experto explicó que los encuentros suelen ser ocasionales, a la salida del boliche, y luego de haber tomado mucho, por lo que no hay tiempo para el conocimiento del otro, “todo es rendimiento sexual, y todo se basa en la cantidad de veces que se llega al orgasmo”.