Científicos de la Universidad de Georgia (EE.UU.) y del Instituto Paul Ehrlich de Alemania, confirman haber tenido éxito con las pruebas en el nuevo fármaco, que permitiría multiplicar la prevención en poblaciones que no han podido ser vacunadas, e incluso en otras donde la inoculación tradicional ha fallado.
“De confirmarse los primeros resultados, estamos ante la mayor contribución posible en los últimos tiempos para la erradicación de la enfermedad?, aseguró e doctor Richard Plemper, a cargo del equipo investigador en la Universidad de Georgia.
Una enfermedad de alto contagio y muchos brotes El sarampión es, al igual que la gripe común, una afección de muy altos niveles de contagio, lo que determina que cualquier brote sea difícil de contener cuando la población no está suficientemente bien vacunada. Los porcentajes de contagio, en niños no vacunados, a consecuencia de gotitas de saliva que al toser, un enfermo de sarampión difunde en el aire, son superiores al 90%.
A partir de que el virus entra en el cuerpo y hasta que se desarrolla la enfermedad, hay un período ventana de hasta dos semanas, durante el cual el nuevo antiviral es capaz de interferir en la evolución de la patología. Lo hace básicamente, interfiriendo en la capacidad que tiene el virus para hacer copias de si mismo, replicándose.
La nueva pastilla para el sarampión, aún no tiene nombre de comercialización y es conocida solamente por su designación de fármaco experimental (ERDRP−0519), durante las pruebas a que ha sido sometido en laboratorio. El sarampión no puede ser experimentado en animales ya que el sarampión es solo una enfermedad humana. Por ello se empleó un modelo similar al de la gripe en dosis letales para animales, pero el tratamiento de tres días logró erradicar por completo la enfermedad, según publica Science Transnacional Medicine.
Fuente: Diario La República