Las empresas recurren a las redes sociales para convocar con más rapidez a los participantes y no cuentan con la debida autorización de la ANMAT. Se estima que éstos llegan a cobrar hasta 1.500 dólares. El Ministerio de Salud de la Nación advirtió sobre los riesgos de participar en estudios de farmacología clínica para probar nuevos medicamentos cuando la convocatoria se realiza por Internet. Expertos admiten que muchas empresas recurren a las redes sociales para colectar más rápido a los participantes de las pruebas a quienes llegan a pagar sumas de hasta 1500 dólares.
Un comunicado del Ministerio de Salud destacó que los sitios de internet en donde se invita a personas a participar de estudios clínicos “pueden ser usados para reclutar personas en estudios no autorizados por la ANMAT”. En este sentido, remarcó que “el riesgo para el paciente es muy alto” ya que queda “fuera del resguardo de lo que un estudio debidamente autorizado implica”.
Según los expertos, los sitios web no garantizan tener un responsable idóneo que conozca profundamente la historia clínica y patología del paciente para asesorarlo, y tanto la información volcada en esas páginas de internet, como la que se proporciona al paciente, no surgen del trato personalizado con su médico.
Por otro lado, remarcaron que
es muy difícil para el paciente comprobar la autenticidad de la información en los sitios web, que además son vulnerables y pueden ser fraguados o alterados. Los estudios de farmacología clínica permiten conocer y poner a prueba un nuevo medicamento, de modo tal que demuestre su utilidad y seguridad antes de ser utilizado por los pacientes.
En este proceso de aprobación se verifica que el proyecto cumpla las normas nacionales e internacionales, tanto desde el punto de vista científico como ético. Se controla a los profesionales que llevan adelante el estudio, a los cuales se les exige que estén debidamente matriculados y capacitados para la tarea, además de exigir la habilitación de los centros donde se van a realizar los estudios.
Asimismo, la ANMAT realiza regularmente inspecciones para verificar que los estudios se estén llevando a cabo de acuerdo a las normas vigentes. Además de explicar que la invitación a participar de este tipo de estudios debe ser formulada por personal idóneo y dentro del marco de la relación de confianza entre el médico y el paciente, desde el organismo regulador se agregó que es el profesional de la salud, conocedor de la historia clínica y patología del paciente.
Para la participación en todo estudio de farmacología clínica aprobado por la ANMAT, la norma exige que el paciente sea debidamente informado y la aceptación de la participación debe constar por escrito, mediante la firma de un documento denominado “Consentimiento Informado”.