Un equipo de investigadores descubrió ciertos detalles de como la leptina interactúa con un receptor del cerebro. Como esta hormona regula el metabolismo y el peso corporal, este hallazgo abre las puertas al desarrollo de drogas para tratar la obesidad.
Un equipo de investigadores descubrió ciertos detalles de como la leptina interactúa con un receptor del cerebro. Como esta hormona regula el metabolismo y el peso corporal, este hallazgo abre las puertas al desarrollo de drogas para tratar la obesidad.
Los especialistas de la Universidad de Michigan (Estados Unidos) explican que “como la leptina es un regulador clave del apetito, comprender como la resistencia a esta hormona genera obesidad es un factor fundamental para descubrir nuevas drogas para la obesidad y la diabetes”. Sus hallazgos fueron publicados en la revista Molecular Cell.
NUEVO CONOCIMIENTO
La leptina, descubierta en 1995, es liberada por el tejido adiposo. Participa en la red que regula el consumo y el gasto de energía corporal. La falta de esta hormona o la resistencia a sus efectos se asocia a la obesidad.
Georgios Skiniotis, bioquímico a cargo del estudio, utilizó un equipo de microscopía electrónica para obtener la primera foto de la interacción entre la leptina y el receptor. A su vez, analizó las similitudes entre este y otros receptores de la misma familia. Su equipo descubrió que cuando la leptina se une al receptor, dos “piernas” del receptor se vuelven rígidas y esto activa a la enzima llamada Janus quinasa.
Esta enzima fue investigada previamente porque su inhibición a través de un fármaco podría ayudar a tratar condiciones como la artritis reumatoide, la psoriasis y ciertos desórdenes metabólicos. “Ahora comprendemos mucho mejor el diseño y los mecanismos de las señales que pasan a través de esta clase de receptores”, afirma.
El experto explica que hay muchas causas detrás del problema de la resistencia a la leptina, pero en algunos casos la raíz del problema se encuentra en el receptor del cerebro. Por ese motivo, comprender el detalle de la interacción de la hormona con su receptor podría conducir a la creación de nuevos tratamientos para la obesidad y lso desórdenes metabólicos como la diabetes.
Fuente: www.neomundo.com.ar